Si el rezo no es respondido es puro cuento.

Platica con Wambli el día de su cumpleaños – 1 noviembre 2020

Tuve la suerte de asistir a la celebración del cumpleaños de Wabli. Jefe de la danza el sol de Chalmita y Calamatlan. Y ahí tuve la oportunidad de platicar con él y escuchar un poco sobre su historia.

Wambli es un hombre de experiencias múltiples de lo sagrado, un hombre que se ha dedicado a la exploración del mundo tal como lo concebían los abuelos y las abuelas, estos hombres y mujeres que se han encargado de resguardar las tradiciones antiguas y la sabiduría ancestral.

Ellos tienen una visión del mundo muy amplia, mucho más amplia y rica de la que experiementamos la mayoría de nosotros que habitamos y nos formamos en este mundo secular moderno materialista.

Hubo varios cosas que dijo Wambli que me parecieron increíbles y de una profundidad que sigo en el intento de integrar. Aclaró que en este texto no expongo de manera textual lo que él dijo, sino lo que se quedo en mi a modo de reflexión.

Lo primero que hoy recuerdo de la conversación fue en relación a los rezos, a nuestras intenciones, a esa relación que uno va tejiendo con el gran espíritu, con Dios.

Desde que vivo en Tepoztlan he ido aprendiendo poco a poco a acercarme más y más a los elementos, al agua, al aire, a la tierra y al fuego. No sólo porque al vivir en la montaña los sientes más cerca y te son más evidentes, sino también porque he aprendido que nos podemos vincular con cada uno de ellos de muy distintas y nuevas maneras para mi.

He descubierto que los puedes honrar con tu intención, hablarles e ir buscando generar una relación consiente, que se siente como si te vinculará con los tejidos de la totalidad y la vastedad de la existencia. Que enfoca tu atención: tu rezo.

Por ejemplo, he aprendido y comenzado una nueva exploración con el canto que me conecta con el aire y eleva mi rezo mediante la vibración de mi ser através de la voz.

O con el fuego, buscando que en el acto de prender uno, desde un lugar de reverencia, paciencia y atención genere una relación con él, y así permitir que su luz, su fuerza, su energía vayan tomando un lugar en mi conciencia. Atreverme a hablarle desde lo más profundo de mi ser, recordando quién es, su esencia transformadora y potente.

También he aprendido que no sólo se reza con las elementos, aunque ellos pueden volverse grandes aliados, sino también con un montón de cosas más que con la correcta intención nos ayudan a recordar nuestro corazón y mantener el enfoque en nuestras intenciones y sueños para que a así vayamos tejiendo nuestra realidad con más conciencia.

Hablando de ello, de los rezos, de lo sueños, hubo algo de lo que dijo Wambli que me resonó y que profundizo más mi comprensión sobre esta relación que tenemos o estamos buscando con la vida. Y lo que dijo, fue, “si el rezo no es respondido es puro cuento”.

Esas palabras me movieron porque con ellas entendí que uno no sólo va por ahí como sujeto deseante de una cosa y de la otra, hablándole al fuego y olvidándse de su intención, si no que si uno reza, que si uno vive con intención, entonces las respuestas tienen que ser dadas, tu vida tiene que cambiar, porque el dialogo esta abierto, y si no lo ves entonces es puro cuento.