Carta a Jessica Said

24 de diciembre 2018. En un avión camino a Marruecos

¡Ay Jess!

Estoy aquí en el cielo y todo alrededor esta lleno de estrellas.

Somos esa esfera de luz y sombra flotando en el espacio infinito.

Esta Tierra nuestra, esta Tierra en la que decidimos encarnar para tener esta vida, para tener este cuerpo, esta Tierra, viva, vivísima nos contiene, cobija y llena de amor.

Hoy siento mi corazón enorme, veo ballenas en el cielo flotando alrededor de mi, veo mi mano escribiendo y me emociono de respirar.

Hemos vivido y muerto muchas veces sin saber, hemos creído en el infierno, en el cielo y en las leyes de los hombres. Hemos cantado en muchas vidas, bailado sin saber del amor infinito del que somos parte.

Hoy siento mucho amor en mi pecho. Lagrimas en mis ojos y toda una emoción deliciosa en el estomago de todo lo que es, y de todo lo que será. Estoy emocionada porque siento que mi vida es y será desde ahora un canto, una celebración.

Amo haber seguido el llamado y hoy saber que existen más planos y dimensiones, que el amor fortalece y que el miedo es siempre un error.

Por eso hoy me relajo y confío. Para qué cargar el mundo, si ella nos sostiene y no sólo eso, nos permite flotar y nadar, conocer las profundidades.

Hoy nado con la corriente, viendo galaxias llenas de vida y momentos llenos de posibilidades para el gozo.

Hoy deseo que siempre estemos conectadas a la divinidad, hoy deseo que el gozo sea nuestra verdad y que nuestro corazón se abra al infinito lleno de certeza, de amor y de luz.